SILENCIO
El silencio era espeso,de tan espeso, impenetrable. Y también era oscuro; un silencio tan oscuro como una pared sólida, como un muro. Un silencio y una oscuridad sólidas, imposibles de atravesar. La sordera total. De pronto un destello de luz se me apareció en un sueño, a través de un pequeño orificio del tamaño que deja la quemadura de un cigarro en un papel. Por detrás del orificio clareaba, se olía, se saboreaba, se percibía el mar, pero no lo podía ver. Cua ndo la imagen dejó de ser difusa y la nitidez entró en mi ojo, encontré que detrás del orificio del papel, sobre un suelo blanco, muy blanco, como una nieve seca, como un porcelanato pulcro, se levantaba una pared aún más blanca, sólida, como un silencio profundo, espeso, sordo. Así era el silencio aquella noche azul...